Este dispositivo promete revolucionar la forma de monitorear la salud, integrando la tecnología de un smartwatch en algo muy pequeño. Desde luego que Samsung sabe que va a triunfar, por lo que ya estaría manos a la obra para desarrollar una segunda versión.
Aquí la novedad es una patente de un posible Galaxy Ring 2 también ha sido aprobada en Estados Unidos, sugiriendo que Samsung ya está pensando en la próxima generación de este dispositivo.
El anillo también parece ligeramente alargado y no tiene un diseño circular único e incluye, según la patente, todo tipo de conectividades como Bluetooth, WiFi, NFC y tecnologías Zigbee y MST para pagos seguros y la capacidad de medir el ECG y el SPO2, junto con otros sensores y contará con baterías que van desde 17 mAh hasta 22,5 mAh dependiendo de lo grande o pequeño que sea anillo.
Samsung planea ofrecerlo en una amplia variedad de tamaños. En Corea del Sur, habrá 27 tallas disponibles, mientras que en Estados Unidos se ofrecerán 65 tamaños diferentes. Aquí, por el momento, se desconoce.
Este primer Galaxy Ring es solo el comienzo de lo que promete ser una nueva era en la tecnología de salud portátil y aunque poco más se puede decir sobre esta patente, lo que sí que se sabe es que esta versión que está a punto de presentarse en París va a ser todo un espectáculo. En cuanto al ansiado precio, parece que se apunta a una cantidad: entre 300 y 350 dólares. Si esto se pasa a euros, se quedaría entre unos 270 y 330 euros.