La Fundación Music For All y la Asociación Cultural Coordinadora Estatal de Salas privadas de música en directo (Acces) han unido esfuerzos para mejorar la accesibilidad y la inclusión en los espacios de conciertos, a través del lanzamiento de un decálogo dirigido a garantizar que todas las personas, independientemente de su discapacidad, puedan disfrutar de la experiencia musical y cultural sin barreras.
Un compromiso con la accesibilidad en la cultura.
Ambas entidades han dado a conocer el contenido del decálogo en un comunicado conjunto, destacando la importancia de que los eventos sean realmente inclusivos. Según el decálogo, un evento debe garantizar una «cadena de accesibilidad» que cubra todos los niveles: físico, informativo, comunicativo y cognitivo. Esta cadena debe permitir que las personas con discapacidad puedan interactuar de manera autónoma, independiente y continuada en todo momento, sin rupturas que interfieran en su participación.
El objetivo es asegurar que el derecho al disfrute de la música en directo sea accesible para todas las personas, para lo cual, aseguran las entidades, es fundamental contar con profesionales capacitados en materia de accesibilidad e inclusión en la cultura. Este enfoque integral busca que las salas de conciertos se conviertan en espacios donde la música esté al alcance de todos, sin importar las capacidades físicas o sensoriales de los asistentes.
Las medidas clave del decálogo
El decálogo propuesto por Music For All y Acces aboga por diez bloques temáticos específicos que abarcan tanto la previa como la durante el evento, con el fin de garantizar la máxima accesibilidad en todas las fases de la experiencia en las salas de conciertos.
Las primeras cinco medidas se enfocan en mejorar el acceso y la comunicación:
- Facilitar la comunicación clara y comprensible para todas las personas.
- Asegurar que las páginas web de las salas sean accesibles y contengan toda la información necesaria.
- Proveer detalles de llegada a las salas para facilitar el acceso a los recintos.
- Accesos preferentes que aseguren un ingreso más fácil a las personas con movilidad reducida.
- Mejorar la señalización dentro de las salas para una navegación más fluida.
Las siguientes cinco medidas abordan la experiencia durante el espectáculo:
- Garantizar una barra accesible, con un itinerario claro y una iluminación adecuada.
- Habilitar espacios preferentes cerca del escenario, que sean señalizados y accesibles.
- Asegurar baños adaptados a las necesidades de las personas con discapacidad.
- Proveer accesibilidad sensorial, con elementos como subtítulos, bucles magnéticos o intérpretes de lengua de signos, en la medida de lo posible.
- Mejorar la formación del personal para que puedan asistir y atender adecuadamente a todos los asistentes.
Una apuesta por la cultura sin barreras
Con este decálogo, Music For All y Acces buscan sensibilizar al sector cultural sobre la importancia de que las salas de conciertos se adapten a todas las personas, sin dejar a nadie atrás. El objetivo final es que la música en directo sea una experiencia inclusiva, en la que todos puedan informarse, adquirir entradas, acceder a los eventos, disfrutar de los conciertos y utilizar todos los servicios del recinto sin obstáculos.
Este paso importante hacia la inclusión cultural refleja un cambio de paradigma en el que la accesibilidad se considera un derecho fundamental, y no una opción adicional. Las entidades firmantes han expresado su compromiso de seguir trabajando para que el disfrute de la música en directo sea una experiencia compartida por todas las personas, con y sin discapacidad.
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